Las hojas de moringa (Moringa oleífera) aportan un notable efecto desparasitante, siendo efectiva contra helmintos (gusanos) y bacterias nocivas. La Universidad de Bombay, en la India, encontró en esta planta una sustancia llamada pterigospermina, de acción antibiótica. Universidades norteamericanas demostraron que este árbol posee isotiocianatos, que accionan contra la bacteria Helicobacter pylori, causa frecuente de gastritis y úlceras. En estos casos se puede utilizar la tintura hecha con sus hojas en solución hidro alcohólica. Se recomienda (según Prama) comenzar utilizando diariamente 20 gotas en un poco de agua, incrementando gradualmente la cantidad hasta llegar a gota por kg de peso. Esta forma de utilización aporta un gran efecto desparasitante y por ello la recomendación de comenzar gradualmente con su ingesta, evitando fuertes crisis depurativas con altas dosis iniciales.